El mismo jueves después de hacer la Foz verde me reuní con Javi, Tomas y su novia Eli; Eran cerca la 6:30 de la tarde y ellos estaban entrando en calor para el día siguiente, haciendo el tramo de al lado del refugio, yo en cuanto los vi me uní a varios descenso. El Primer descenso de ese tramo lo vi complicado con mucha roca y un intenso cúmulo de maniobras que por mi falta de práctica en este tipo de ríos no tardó en pasarme factura pues tuve que salir nadando!! Tomas y Javi no tardaron en recuperar el material pero eso no me desmoralizó y quise probarlo de nuevo, esta vez siguiendo los consejos de mis compañeros Tomas y Javi expertos en este tipo de ríos. La segunda vez exitosamente y sin ningún percance! Ahora ya sabía lo que me esperaba, y nos las tenía todas en hacer la parte de arriba pero con la compañía de estos dos kayakers me dio la seguridad para que al día siguiente me uniera a ellos en el descenso del cañón Rojo!!
Tras pasar la noche en tienda de campaña y en cuanto salió el sol, nos desplazamos hasta donde podía llegar el coche y aún así caminamos un largo recorrido con los kayaks a cuestas con todo el pavimento nevado hasta el embarque. Las sensaciones que tenía eran a la vez que nerviosismo e inquietud, un poco de MIEDO, porque no decirlo!! Pues no sabia lo que me iba a encontrar y por la inexperiencia en esta clase de ríos con mucha piedra y muy técnico, (había veces que me preguntaba a mi mismo ¿donde te estas metiendo?) aunque como e dicho al lado de mis dos compañeros expertos se desvanecía y una vez subido al kayak dispuesto a todo!
El paisaje ya lo valía todo, un intenso descenso de un recorrido sinuoso y de una constante pendiente, con un porteo de un paso infranqueable, un par de sustos el primero lo pude superar al volcar y no poder esquimotear y Tomas al acercarme la puntera de su kayak para poder recuperar la posición (y esque con tanta piedra dificulta el esquimoteo) y la segunda una vez ya terminando, ya más relajado al despistarme y chocar con una roca, salí esquimoteando pero sin antes haber recibido varios golpes en el pómulo de la cara y barbilla pero por suerte sin consecuencias graves, (conclusión "casco integral para próximos descenso) y es que de todo se aprende y más al lado de gente experta la cual me acompañaba! 
UNA VIVENCIA QUE TARDARÉ EN OLVIDAR ¡INCREIBLE!
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